26.11.06

Videos del Hindenburg


En su brillante blog "Magonia" , Luis Alfonso Gámez se refiere al reportaje que John Schwartz realizó a los "cazadores de mitos" en el New York Times de la semana pasada. No hay nada que agregar a lo ya expresado por el periodista científico y destacadísimo escéptico bilbaíno sobre el maravilloso programa de Discovery Chanell .

En realidad hablaremos del mito que se examina en el episodio sobre el dirigible Hindenburg , que se puede observar de cerca en éste video mudo . Para un acercamiento al momento del desastre tenemos este video con audio . La reconstrucción del suceso en modelos a escala por parte de los "Mythbusters" se puede observar en un clip exclusivo para NYT ya que el programa será emitido en 2007. Para verlo, sólo hay que suscribirse en forma GRATUITA al diario...y conviene hacerlo ya que su sección de ciencia es excelente.

"Cazando" un mito:

Para la mayoría, el causante del incendio del 6 de mayo de 1937 fue el hidrógeno altamente inflamable. Sin embargo, algunos afirmaron que la pintura utilizada para endurecer el revestimiento del dirigible- y no el hidrógeno- había sido la que provocó el desastre pues contenía una mezcla de limaduras de aluminio y de óxido de hierro que -a elevadas temperaturas- se comportó como un peligroso explosivo: la termita .

Se planteaba así uno de esos problemas que son tan atractivos para Hyneman y Savage , los cazadores de mitos expertos en efectos especiales.

Para probar o refutar la conjetura de la termita , construyeron tres modelos del dirigible a escala 1/50 . Dos de ellos reproducían el revestimiento del Hindenburg incluyendo muñecos que representaban a las personas que se veían en el noticiero .

El primer modelo , que no estaba lleno de hidrógeno, fue encendido por Hyneman directamente en la cola por medio de una antorcha que estaba en el extremo de un largo palo. El minidirigible ardió en esa zona durante minuto y medio pero, de golpe, el fuego se extendió por completo en pocos segundos. Después de dos minutos sólo quedaba el esqueleto tal como se observa en el video del noticiario. Sin embargo, la misma histórica filmación mostraba que el Hindenburg no se había incendiado de esa manera. Estos "fracasos" son de lo más común en las investigaciones científicas, nos cuenta Schwartz en su artículo del New York Times. Lo importante es saber interpretarlos y que sirvan para desechar y/o reformular nuestras hipótesis de trabajo.

El segundo modelo a escala estaba repleto de hidrógeno . El incendio se extendió rápidamente hacia arriba y a todo el dirigible tal como se observa en el video del noticiero de 1937. "Evidentemente el hidrógeno ayudó y afirmar que su rol fue insignificante es algo idiota", asegura Savage. De esta manera quedaba refutada la conjetura de que sólo la pintura hubiera sido la culpable del desastre. Aunque Hyneman agrega que la tela del revestimiento tuvo que ver en la rápida expansión del fuego quedaba por probar algo más sobre la pintura en sí.

El tercer experimento debería probar que la tela del Hindenburg había sido tratada con una sustancia similar a la termita en lugar de un derivado químico que cumpliera la misma función de soldadura que provoca aquella. Para ello , el equipo mezcló en la tela una cantidad de termita real, que es sumamente explosiva. El incendio fue tan rápido y devastador que decididamente no se parecía a lo que se observaba en el video de 1937. Llamas que enceguecían la visión , humo amarillento y las gargantas irritadas de los miembros del equipo reforzaban ésta idea. "No hay duda de que lo que observamos no se parece a lo sucedido al Hindenburg" concluyó Savage.

En todos estos experimentos los videos originales del momento del desastre cumplieron una ayuda inestimable para los investigadores . Claro que los "cazadores de mitos" los han utilizado de una manera diferente a como los usan los "cazadores de misterios".




17.11.06

El factor Wiseman


Desde tiempos inmemoriales muchos han creído que la suerte era una misteriosa fuerza que podía ser atraída por medio de amuletos o de rituales .

Ciertas fechas del calendario favorecerían la mala fortuna (para nosotros el martes trece, para los anglosajones el viernes trece) . Realizar determinadas acciones “traería mala suerte”: pasar por debajo de una escalera apoyada contra la pared, levantarse de la cama con el pie izquierdo, casarse o embarcarse un día martes, romper un espejo, ver a un búho en cualquier circunstancia – una superstición específicamente japonesa-.

Por el contrario, realizar otras acciones determinadas desharían el daño causado por la mala suerte: tocar un objeto de madera , cruzar los dedos si algún imprudente hace referencia a la muerte, etcétera,etcétera.

En todas estas supersticiones subyacen creencias mágicas donde “la suerte” es algo misterioso y desconocido . Al igual que un virus, se la adquiere o se la porta . Lejos de considerarla algo "paranormal" , el psicólogo británico y conocido investigador de fenómenos inusuales Richard Wiseman afirma en su libro “El factor suerte” que hay personas que realmente poseen una extraña habilidad para estar “en el sitio adecuado y en el momento oportuno” y que –de manera inadvertida- la utilizan mucho más que aquellos que no la tienen en cuenta. La misma idea se podría aplicar a personas que se consideran especialmente infortunadas . Todo ello puede estudiarse científicamente asegura el investigador principal del CSICOP.

Es así como Wiseman ideó el “laboratorio de la suerte”. Realizó cientos de entrevistas y cuestionarios para setecientos sujetos experimentales a lo largo de ocho años (fue entonces cuando publicó su libro, pero las investigaciones continúan ininterrumpidamente desde 1994) hasta completar dos grandes grupos: los que se consideran a sí mismos con suerte y los que se autocalifican como desafortunados.

Indagó si la fortuna o la desventura se concentraba en determinados aspectos de sus vidas o se extendía a todas las facetas vitales (vida familiar, situación financiera, salud, etc.) y a todos les aplicó una escala que investigaba en que áreas se hallaban más satisfechos. Aunque la mayoría estaba convencida de que la mala o buena suerte se debía a la casualidad, el científico británico notó que se repetían demasiadas “casualidades” en un grupo y en el otro. Descartando la “hipótesis sobrenatural”, Wiseman conjeturó que los propios pensamientos y conducta eran los responsables de la buena o mala suerte.

Según relató el psicólogo Michael Shermer en un artículo de su columna mensual en Scientific American, Wiseman administró a los sujetos experimentales el test de personalidad denominado “Big five” creado por Paul Costa y Robert Mc Crae que mide cinco dimensiones de la personalidad: neuroticismo, extroversión, apertura a las experiencias, cordiabilidad/amabilidad y escrupulosidad/responsabilidad. Mientras no había diferencias significativas para las dos últimas variables, las personas afortunadas obtenían puntajes mucho más altos en las tres primeras. Los “afortunados” eran por lo general también menos ansiosos, más extrovertidos y no temían enfrentar situaciones novedosas.

Cuando se trataba de sucesos totalmente aleatorios como ganar en juegos de azar, prácticamente no había diferencias entre ambos tipos de personas: los agraciados no son mejores adivinos por tener más suerte en su vida diaria. En la cotidianeidad, en cambio, nuestra actitud (pensamientos y conductas) influye mucho en los acontecimientos: por eso un optimista no se dejará vencer tan fácilmente ante la primera dificultad que encuentre y probablemente intente soluciones alternativas al problema que se le presente.

Con tales resultados, Wiseman concluyó que los individuos afortunados generan su propia buena suerte a través de cuatro principios básicos: 1) son hábiles para crear y aprovechar oportunidades 2) deciden acertadamente porque prestan atención a sus propias intuiciones o corazonadas y no los paraliza la duda 3) verifican profecías autocumplidas debido a que mantienen expectativas positivas y 4) adoptan una actitud flexible que transforma la mala suerte en buena suerte.

Las investigaciones de Wiseman no se han limitado a ésta temática. Ha estudiado los indicadores verbales y no verbales de la mentira y diseñado técnicas para detectar engaños. También ha mostrado como los magos manipulan la atención del público en momentos claves de sus actuaciones para que la audiencia "baje la guardia" y esté atenta a lo que no hay que atender. Ha examinado la (nula) fiabilidad de los testigos de "fenómenos paranormales". Ha realizado experimentos ESP, indagado a "médiums" y "psíquicos", investigado casas y palacios encantados- y diseñó un curioso experimento interactivo para estudiar la memoria a corto plazo. Lleva publicados más de cuarenta artículos científicos en revistas científicas con referato , como por ejemplo, Nature.

Podemos asegurar que, por lo menos él sí, ha sido el responsable de su "buena suerte".


15.11.06

Introducción al pensamiento crítico y a la psicología del engaño


Estimado/a amigo/a:

A partir del martes 21 de noviembre, El CFI-Argentina llevará a cabo el seminario "Introducción al pensamiento crítico y a la psicología del engaño", dictado por Alejandro J. Borgo, director del CFI-Argentina y Enrique Márquez, ilusionista y consultor de la revista Pensar.

El seminario se dictará todos los martes, hasta el 12 de diciembre inclusive (4 martes), de 19:30 a 21 hs.

Contenidos:

PENSAMIENTO CRÍTICO

¿Qué es el pensamiento crítico? ¿Para qué sirve? ¿Es una necesidad social o un lujo académico? El pensamiento crítico como herramienta para entender y modificar la realidad. Falacias y eufemismos en el discurso político, económico, religioso, pseudocientífico y mediático. Medias verdades, eslóganes, aprendiendo a leer entrelíneas. ¿Por qué es necesario el pensamiento crítico?

PSICOLOGÍA DEL ENGAÑO

El engaño en la naturaleza. La simulación en la lucha por la vida. Formas intermedias del engaño. Mimetismo. Tipología biopsicosocial. Modelos y referentes. Procesos de comunicación. Sugestión. Persuasión. Moldeamiento. Modificación comportamental. Ilusionismo. Claves para detectar engaños.

PSICOLOGÍA DEL AUTOENGAÑO

El "efecto Clever Hans". Automatismos motores. Ciencia patológica y engaño autoinducido. Error de disponibilidad. Ilusiones. Psicología anomalística. Alucinaciones. Alucinosis. Pronofantasías. Síndrome de la Falsa Memoria. Convicción y profecía autocumplida.

El costo del seminario será de $80.- (No es necesario ser amigo ni miembro adherente ni miembro benefactor del CFI-Argentina. Ver información abajo)

Las vacantes son limitadas. El cupo máximo será de 15 personas.

IMPORTANTE

Nuestro centro ha creado las figuras de "Amigo", "Miembro adherente" y "Miembro benefactor" del CFI-Argentina, esto es, una alternativa que, a cambio de una cuota anual, le permitirá obtener una suscripción anual o bianual a la revista Pensar y descuentos en todas las actividades que desarrollemos en el futuro, incluyendo al seminario sobre el cual se avisa en este mensaje.

El objetivo es colaborar con el CFI-Argentina en su tarea de difundir la ciencia y la razón, y promover una ética no basada en el dogma, y hacer frente a los fundamentalismos que la sociedad vive actualmente. Necesitamos de su colaboración.

Opciones y características

"Amigo"

Cuota anual de $50.- que incluye una suscripción por un año a la revista Pensar, y un 10% de descuento en todas las actividades pagas que realice el CFI-Argentina y en los materiales didácticos: libros, revistas, videos, CDs, DVDs, etc., hasta el vencimiento de la cuota anual correspondiente.

"Miembro adherente"

Cuota anual de $100.- que incluye una suscripción por un año a la revista Pensar y 30% de descuento en todas las actividades pagas que realice el CFI-Argentina y en los materiales didácticos del CFI-Argentina: libros, revistas, videos, CDs, DVDs, etc., hasta el vencimiento de la cuota anual correspondiente.

"Miembro Benefactor"

Cuota anual de $300 ó mayor: suscripción por 2 años a la revista Pensar y 50% de descuento en todas las actividades pagas que realice el CFI-Argentina y 30% de descuento en los materiales didácticos del CFI-Argentina: libros, revistas, videos, CDs, DVDs, etc., hasta el vencimiento de la cuota anual correspondiente.

Visítenos los lunes, miércoles y viernes de 15:30 a 20:30 en nuestra sede: Av. Santa Fe 1145 - 2do piso - Cap. Fed.




Alejandro J. Borgo
Director - Revista Pensar
www.pensar.org
info@pensar.org

14.11.06

Proteínas rigurosamente vigiladas

La estructura tridimensional de cada proteína es la que determina sus propiedades biológicas. El complejo proceso por el cual adopta su forma espacial específica se denomina “plegamiento” y es supervisado por unas proteínas llamadas “chaperonas”.

En el pasado los novios sólo podían pasear juntos si eran seguidos de cerca por una persona que, en silencio, controlaba que se guardaran las formas y sólo intervenía si los amantes actuaban en forma incorrecta. Es cierto que los antiguos chaperones han pasado de moda, pero las chaperonas celulares tienen plena vigencia.

El bioquímico Armando Parodi, presidente de la Fundación Instituto Leloir y miembro de la Academia Nacional de Ciencias de los EEUU (NAS), investiga desde hace más de veinte años cómo se forman las glicoproteínas (azúcares adheridos a proteínas), cual es el proceso que les permite adquirir la forma adecuada (plegamiento) y el papel que desempeñan las chaperonas moleculares en ese trayecto.

“Una vez que son creadas las proteínas poseen forma lineal, pero enseguida comienzan un proceso por el cual se van doblando y plegando hasta adquirir una estructura tridimensional que determinará sus propiedades biológicas”, asegura el experto que también es investigador principal del CONICET. La dirección del plegamiento viene determinada por la longitud y la secuencia de aminoácidos que forman su esqueleto, pero si no alcanza la forma correcta será degradada a sus aminoácidos constitutivos.

Para evitar fallas, la célula posee sistemas de control dirigidos por las proteínas chaperonas que desde cerca vigilan y eventualmente corrigen el problema. Si los sistemas de chaperonas intervienen, toman contacto sólo con una pequeña parte de la proteína en plegamiento lo que será suficiente para hacer las correcciones necesarias.

Las “chaperonas convencionales” (por ejemplo, la Hsp 70) realizan el control de calidad cuando el proceso recién comienza y las proteínas aún son lineales. Cuando descubren aminoácidos hidrófobos que son poco solubles en agua e indican que la proteína aún no ha tomado su forma espacial adecuada, se les pegan para que no puedan “tentarse” de hacer algo incorrecto: pegotearse a otras proteínas. “En realidad se les pegan y despegan hasta que ya no los detectan”, aclara el científico. Una vez que deja de actuar éste sistema de ayuda, comienza actuar otro sistema cuyo mecanismo de acción fue esclarecido por Parodi y su equipo.

El segundo sistema de control de calidad actúa en las últimas etapas del proceso. Las “chaperonas no convencionales” (calnexinas o CNX y calreticulinas o CRT) no reconocen a los aminoácidos sino que interactúan con los hidratos de carbono. Por consiguiente, se unen a la proteína a través del azúcar pero no pueden advertir si está bien o mal plegada. Para hacerlo se valen de la glucoproteína glucosiltransferasa (GT) que sí, es la que reconoce a los aminoácidos expuestos. Sólo si los descubre (lo que es un signo de plegamiento incompleto) les adhiere una glucosa. En realidad la GT no reconoce a los aminoácidos específicos sino superficies que el científico denomina “parches hidrófobos”.

Las fallas en los controles de calidad del plegamiento pueden provocar la acumulación de glicoproteínas que no han adquirido su estructura tridimensional correcta lo que podría provocar enfermades muy graves. Un ejemplo es la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (una demencia en la cual los cerebros se llenan de agujeros como los de una esponja). El 90 por ciento de los pacientes mueren al año de comienzo de los primeros síntomas.

El gran desafío para los científicos será lograr que las chaperonas vigilen aún mejor, sean más eficaces y que actúen siempre que pueda producirse un contacto indebido. Todo lo contrario de lo que hubieran querido los amantes de otras épocas.

8.11.06

No recen por Dennet

El filósofo de la ciencia Daniel Dennet autor de "La conciencia explicada" (1991) y "La peligrosa idea de Darwin " (1995) se ha destacado en el ámbito de las Ciencias Cognitivas y en el debate sobre la Evolución. Fue todo un clásico su enfrentamiento con Stephen Jay Gould y sus discípulos. Hace unos años , junto a Richard Dawkins propuso reemplazar los términos " ateo" y "agnóstico" por el de "bright"(brillante) . El escéptico Chris Mooney criticó tal pretensión en su columna "Doubt and About", del CSICOP.
Desgraciadamente, Dennet ha vuelto a ser noticia últimamente porque su vida corrió serio peligro. Sin embargo, ya se repone satisfactoriamente , escribe sobre su "experiencia cercana a la muerte" en Edge y nos cuenta que ha tenido una "revelación" bright : nos invita a que no perdamos el tiempo rezando por su salud :-)

Ciencia y Tecnología en los diarios argentinos

La Secretaría de Ciencia y Técnica (SECYT) del Ministerio de Educación publicó el informe final del proyecto "Análisis de la oferta informativa sobre Ciencia y Tecnología en los principales diarios argentinos". El extenso documento puede ser consultado aquí.

7.11.06

Llegó la era de "Aquarius"

Durante el año 2009 se lanzará al espacio la misión satelital SAC-D/Aquarius producto de la colaboración de las agencias espaciales norteamericana (NASA) y argentina (CONAE) . Gracias a ella se obtendrá por primera vez un mapa global de la salinidad oceánica de la Tierra.

En la actualidad , los satélites de teleobservación registran la temperatura de la superficie de los océanos del planeta en su totalidad pero la concentración de sales disueltas en el agua marina aún se obtiene de muestras que se recolectan desde barcos de investigación. Esto sólo puede realizarse en ciertos lugares, a veces en condiciones meteorológicas adversas y aún así, los resultados no permiten sacar conclusiones globales.

El acuario sin peces

El Sac-D portará un sensor provisto por la NASA llamado Aquarius. Este delicado instrumento registrará la humedad del suelo, lo que servirá para dar alertas tempranas de inundaciones en territorio nacional. Sin embargo su objetivo científico principal será medir la concentración de sal en los océanos lo que permitirá a los investigadores realizar el primer registro global de salinidad marítima. “En sólo siete días ya tendremos información de todos los mares del planeta y mes a mes podremos comparar los mapas de salinidad obtenidos”, asegura el Dr. Raúl Colomb, jefe científico de la misión.

La misma información será utilizada para distintas finalidades según el interés de los países. Los EEUU usarán los mapas de salinidad para comprender mejor el calentamiento global. “Para la NASA, Aquarius es un instrumento de ciencia básica, de utilidad académica” afirma el científico que también es miembro del directorio de CONAE. “En cambio la Argentina, se enfocará más en el ámbito productivo ya que la salinidad del Mar Argentino suele dar buenos indicios de la ubicación de ciertas especies de valor pesquero.”

Los investigadores intentarán comprender en detalle la circulación y procesos de mezcla de las corrientes oceánicas. “La denominada cinta transportadora de circulación de los océanos se mantiene gracias a la alta salinidad del Atlántico”, comenta el experto. Según explica un informe en la revista de divulgación científica Exactamente “una corriente superficial lleva aguas cálidas y de menor nivel salino desde los Océanos Pacífico, Indico y Atlántico Sur hacia el Atlántico Norte. Allí el agua se enfría, gana salinidad y debido a su mayor densidad se hunde y circula en profundidad hasta completar el recorrido”.

Relaciones vitales

Colomb advierte que “aunque todo el mundo sabe que el agua de mar es salada, pocos están al tanto de que pequeñas modificaciones en la salinidad superficial pueden tener efectos dramáticos sobre el ciclo del agua y la circulación oceánica”.

Los científicos intentarán comprender la circulación marina, el ciclo del agua y su interacción con el cambio climático a través de la medición global de la salinidad de la superficie del mar.

Si tenemos en cuenta que el 86 por ciento de la evaporación y el 78 por ciento de las precipitaciones globales ocurren sobre la superficie de los océanos, se evidencia su papel como modulador del sistema climático.

En una publicación de la UNESCO, el activista por la paz Robert Stewart señala que “los océanos juegan un papel clave, pero frecuentemente incomprendido, en la determinación del clima terrestre” y enfatiza que “para que exista una posibilidad de predecir el clima, más allá de unas pocas semanas, necesariamente debe tomarse en cuenta el comportamiento de los mares”

A los expertos en oceanografía y cambio climático les gusta afirmar que el océano es “el termostato de la Tierra”. Si tenemos en cuenta las tareas que realizará Aquarius, pareciera ser que los científicos de NASA y CONAE están de acuerdo con ellos.